En tiempos atrás, en días de antaño, nace un elfo nocturno de familia humilde y de linaje cazador, que con gran astucia superaba todo obstáculo que en su camino se cruzaba. creciendo con sus hermanos y su arco en mano, llego a ser el mejor para la cacería, al tiempo pasar, su padre es solicitado para pertenecer a las filas de batalla debido al regreso del rey exánime, pero su paradero en la guerra nunca se supo, para ese entonces el joven elfo se convertía en un hombre, más allá de la cacería tenía otras metas, empezó a interesarse en las piedras preciosas y sus estructuras. Un día por la mañana, llegaron emisarios de la ciudad de Ventormenta, era la primera vez que el joven elfo veía a un humano. estos tenían el objetivo de llevar reclutas para la batalla. Este sintió interés e intento probar su suerte para ser admitido, pero fue rechazado por alguna razón, al siguiente día, llego a su cabeza la idea de que dentro de su tierra no lograría sus sueños. Así que tomo su arco y una vieja hacha de batalla que su padre tenía guardada, y con unas cuantas monedas escapo mientras todos dormían, Tomo rumbo a Darnassus para irse de la isla, pocas veces llego a estar en aquella ciudad así que pedía dirección a los centinelas para dirigirse a fuera. al llegar al muelle, escucho la voz de su hermano que decía.
-¡¡DEIRONS!! ¡¡HERMANO!! El joven elfo volteo y se encontró con su hermano.
-No trates de detenerme, (Dijo Deirons) sabes que me iré sin retorno.
-No, no intentare detenerte, (Dijo su hermano mientras le entregaba un libro) solo quiero saber cómo es el mundo allá afuera, y no podré ir, quiero entregarte esto para que me anotes todo lo que hallas visto y todo lo que logres en tu viaje, además de enviarme una carta cada fin de mes que diga cómo estas y donde estas, para que nuestra madre no se preocupe por ti. Faler no pudo resistir llorar con su hermano y juntos esperaron a que su barco llegara y antes de irse se acercó a su hermano. - ¿sabes?, volveré para contarte mil historias, y en este libro estarán escritas todas y cada una de ellas.
Cuando el barco a costa oscura zarpo, Faler hecho su vista al mar y con una sonrisa abandono su hogar para adentrarse en una gran aventura que definiría su destino.
-Si. (Dijo Deirons)
-Provengo del Exodar, quedarme allá no me da mucho resultado, hay muchos afectados y velen quiere que vivamos nuestras vidas más allá de una isla.
¿Qué tanto conoces de este mundo? (Dijo el Draenei)
-No sé nada, es la primera vez que realizo una aventura fuera de mi hogar. (Dijo Deirons)
-Eso quiere decir que tenemos la misma posición. (Dijo el Draenei)
-Eso parece. (Dijo Deirons)
-Bueno, mi nombre es Kirgios, me dedico al chamanismo. (Dijo el Draenei) Yo soy Deirons, soy un cazador. Mientras seguían hablando el barco hacia Ventormenta se aproximaba y lo tomaron para tocar puerto en Elwynn. Pasaron un par de días para atravesar el mar. al tocar puerto en la gran ciudad de Ventormenta, Deirons y Kirgios quedaron impactados por las increíbles estructuras así que se encaminaron a recorrer sus calles. Había una gran cantidad de población de todos los lugares, todas las razas de la alianza en un solo lugar, mientras se encontraban en las calles de tal ciudad, decidieron pasarse por el pueblo de villa dorada, a las afueras de la ciudad, justo en el corazón de los bosques de Elwynn, Allí hicieron su parada para descansar. Pasado un tiempo, Kirgios y Deirons se hicieron mejores amigos, lucharon juntos y los dos vivieron grandes aventuras en el transcurso de los años. Un día se encontraban en el Exodar donde Deirons estaría aprendiendo más sobre las gemas de los Draenei y Kirgios vería a su familia, pero la noticia de las tierras devastadas de Terrallende llego a Deirons mientras observaba a unos historiadores del Exodar por lo que Deirons decidió conocer ese mundo, para esta aventura su amigo no lo acompañaría por lo que fue solo, ante el portal oscuro al sureste de los reinos del este. Por primera vez Deirons atravesaba un portal y cuando por fin llego al otro lado se encontraba mareado. Este enfoco su vista y lo que vio fueron solo ruinas y ejércitos de la legión que deseaban entrar a Azeroth. Lo que veía le disgusto, era totalmente distinto a como él se lo imaginaba. En eso un enano se acercó a él.
-Es horrible lo que paso aquí. (Dijo el enano)
-Nunca imagine algo como esto. (Dijo Deirons)
-Pues bienvenido a Terrallende, tierra de nadie, donde las guerras y la legión acabaron con todo a su paso. (Dijo el enano)
- ¿Solo quedan ruinas? (Pregunto Deirons)
-No todo, más allá de las montañas de la península infernal hay tierras con vida, pero no creo que sobrevivan por muchos años más, a menos que la legión ardiente sea destruida y si vas a explorar estas tierras ten cuidado con el abismo, ¡el vacío es un misterio! (Dijo el enano mientras se volteaba e iba caminando) Deirons decidió explorar tales tierras sin miedo alguno y en sus viajes recorrió todo lo que quedo de Terrallende, sin olvidar ningún rincón., para luego volver a Azeroth donde lo esperaba otra aventura.
Deirons se interesó por aquellas tierras donde su padre murió, quería ver cómo era ese lugar así que fue hacia allá con prisa tomando el primer barco con rumbo a Rasganorte. Le tomo unos cinco días llegar a ese nuevo continente, cerca de allí Deirons comenzó a sentir un frio enorme y sus grifos no podían volar en esa clase de clima por lo que tuvo que llevarse solo a moteado (su tigre de montar), en eso llegaron a la fortaleza --- en tundra boreal donde Deirons seguiría con su viaje.
El tiempo paso y ya habían pasado 10 años desde que Deirons había escapado de su hogar adentrándose en sus aventuras, cuando llego el momento, Deirons termino el libro que su hermano Faler le había entregado, así que lo envió con un mensajero hacia su hogar esperando que su hermano lo recibiera. Faler quedo impactado por todas las cosas que su hermano había hecho, pero para ese tiempo, su madre había perecido, fue una dura noticia para Deirons y sus hermanos. Faler y los demás hermanos ahora Vivian en casa de una buena amiga de la familia por lo que este elfo no tuvo mucho interés por quedarse, Faler no se interesaba mucho por el arco y la flecha, este prefería usar la espada y tomando una de las armerías de la ciudad de Darnassus huyo hacia costa oscura con algunas provisiones en una bolsa llevando consigo el libro de las aventuras de Deirons. Faler en su camino no corrió la misma suerte que Deirons por lo que paso meses sin mucho que comer, paseándose por Ventormenta como un mendigo, en uno de esos días, un humano encapuchado se acercó a él.
-Te vez mal, ¿quieres comer algo? (Dijo el humano) Faler al oírlo, asintió con la cabeza.
- ¿Estás dispuesto a pagar cualquier precio? (Replico el humano)
Faler comenzaba a notar que este humano era extraño pero el hambre y el frio de las noches eran algo que no quería sentir de nuevo.
-Hare lo que quieras. (Dijo Faler) El humano comenzó a decir un ritual con el cual creo un portal para que Faler lo atravesara y así fue, el elfo no tuvo más que aceptarlo e irse junto al humano. Faler fue torturado y entrenado para convertirse en uno de los caballeros de la muerte donde serviría solo a su jefe el rey exánime. Faler inicio su camino junto a un orco llamado Agonor, aunque apenas se entendían los idiomas, fueron amigos y se ayudaban entre los dos. Al pasar de los meses Faler comenzaba a notar en lo que se convertía, Mientras esta sensación de poder oscuro torturaba a Faler por las noches, Agonor lo acogía echando a un lado todos sus sentimientos. Cuando Faler supo de los planes del alto señor Darion quiso unirse a la causa y así fue, pero tubo temor de contárselo a Agonor, ya sabía que su amigo no tenía sus mismos pensamientos. Cuando inicio la rebelión de Darion contra el rey exánime Faler estuvo del lado de los rebeldes, aunque la batalla fue larga, en un momento se encontraron Faler y Agonor cara a cara.
- ¿Por qué nos traicionas? (Dijo Agonor)
-Esto está mal, lo sabes, mira tus manos, has matados miles de inocentes y ¿por qué? (Dijo Faler)
Mientras estaban allí parados, mas caballeros de la muerte unidos a la rebelión se acercaban. - ¡Suelta tus armas! ¡Te perdonaremos la vida! ¡No somos asesinos! (Repuso Faler) Agonor lleno de ira se alejó del lugar ignorando a su mejor amigo. Ese mismo día se obtuvo la victoria por parte de los rebeldes los cuales ahora serian llamados la espada del ébano. Faler por su parte se alejó de estos y fue en busca de una nueva vida. Muchos de los que deseaban comenzar sus vidas debían ir con el rey de la alianza o la horda, muchos caballeros de la muerte se arrodillaron ante el rey Varian esperando ser perdonados por todas las atrocidades que un día cometieron, tanto en la horda como la alianza fueron admitidos todos aquellos que deseaban regresar, entre esos estaba Faler. Cuando Deirons supo sobre su hermano, comenzó a buscarlos por toda Ventormenta, pero sin suerte, el mismo ya se había ido. Por otra parte, Agonor había vuelto con el rey exánime en espera de nuevas órdenes, pero las palabras que escucho fueron “busquen y maten a todos los traidores” Agonor con una sonrisa en su rostro ya sabía cuál sería su objetivo, cuando supo la ubicación exacta de donde estaba Faler fue tras el para matarlo.
Agonor se encontró con Faler en un camino que pasa por Valle Fresno. - ¿A qué vienes? (Dijo Faler) Por su aspecto Agonor parecía estar llevado por su ira por lo que Faler desenfundaba su espada lentamente.
-Solo vengo a cumplir órdenes de mi señor. (Dijo Agonor) En ese momento Agonor se lanzó contra Faler y estuvieron peleando a muerte, en la pelea Faler intentaba hacer entrar en razón a Agonor, pero este no lo escuchaba, en un momento de la batalla Agonor logro atravesar a Faler con su espada hiriéndolo de muerte y cayendo al suelo, Agonor por un momento se quedó mirando a Faler ya este interpuso su mano impidiendo que Agonor siguiera.
- ¿Recuerdas aquellos momentos en los que siempre estaba leyendo un libro? (Dijo Faler) Agonor solo se quedó callado.
-Desde que era pequeño soñaba con ser un héroe, soñaba con ser como mi hermano. Justo en el momento en que lo vi partir, el me prometió que me entregaría un libro que yo le di donde estarían escritas todas sus aventuras e incluso, dejó unas últimas páginas para mí. Sabía que yo también querría salir a explorar este mundo y por eso dejo unas páginas de este libro para que yo lo terminara… y así fue. Todo este tiempo estuve leyendo y escribiendo con el fin de que volviera mi hermano esperando verlo sonreír. (Dijo Faler)
Agonor comenzó a ablandarse y soltó su espada. -Mátame, pero te pido que le regreses este libro a mi hermano, si de algún modo puedes leerlo te pediré que lo hagas, si mis palabras no pueden convencerte, este libro lo hará. (Dijo Faler) Faler murió, Agonor quedo minutos pensando en las palabras de su amigo y con lo que sabía, leyó el libro. Mientras leía las ultimas paginas comenzó a llorar, luego tomo el cuerpo sin vida de Faler y lo llevo en su destrero hasta llegar al pueblo de Astranaar donde dejo su cuerpo para que los centinelas lo encontraran. Agonor se alejó y también se apartó del rey exánime con la esperanza de cambiar el odio que siempre lo movió desde un principio, en su camino se encontró con una hermandad donde fue aceptado y con quienes comenzó su nueva vida. Cuando Deirons supo que su hermano fue encontrado muerto a la entrada de un poblado en Valle Fresno, fue de inmediato, al ver a su hermano sin vida se llenó de ira, pero noto que el libro no estaba con él, Deirons inicio la búsqueda del asesino que mato a su hermano.
El frio que corría por la piel, era de pánico, muchos de los presentes eran nuevos, pero había grandes personajes reconocidos por toda Azeroth que serían capaces de morir si era necesario, entre ellos estaba Deirons, un cazador entre tantos. Las banderas eran izadas por los intendentes de la batalla y aquellos parajes de Arathor se llenaban de una espesa niebla que cerraba el horizonte las líneas estaban llenas de todo tipo de razas y clases, eran un gran número, pero los informes decían que la Horda los superaba al doble, la batalla iniciaba y entre los campos comenzaron a luchar, Deirons se encontraba con kirgios, el Draenei chaman con el cual comenzó su aventura. Los dos peleaban uno junto al otro. La batalla fue larga y dura, las banderas de la alianza y la horda se alzaban con valor. En últimos momentos la niebla se había dispersado a causa de la batalla pero aunque la alianza estaba acabada Deirons en un momento vio a Agonor dentro de la batalla y por los rumores, supo que había sido el quien mato a Faler, Deirons se llenó de ira, mientras que kirgios y todos los demás se retiraban, Deirons se enfrentó matando a diestra y siniestra todo en su camino hasta llegar a Agonor, con su rifle disparo a este pero fallo y en ese momento, un troll que portaba también un rifle disparo contra Deirons impactándole en la hombrera derecha destruyéndola por completo, Deirons se concentró e hizo otra descarga al troll matándolo de inmediato, mientras Deirons mataba al troll, Agonor lo sorprendió por la espalda atravesándolo con su espada. Deirons soltó sus armas y cayo de rodillas.
-Mátame igual que a mi hermano, asesino. (Dijo Deirons)
Agonor supo de inmediato que era el hermano de Faler.
-Fue un error lo que paso ese día. (Dijo Agonor) Deirons quedo atónito cuando escucho al orco hablar Darnassiano. Mientras que Agonor sacaba de su bolsa el libro de Faler y lo lanzaba al suelo.
-Me dijo que te lo entregara, sé que lo mate, pero él fue quien me cambio, tenía un gran corazón. (Dijo Agonor) Agonor retiro la espada de Deirons y se alejó del lugar, en ese momento, Deirons estaba al borde de la muerte, pero luego vio al cielo y en cuestión de segundos, un renegado se acercó a él, era un brujo no muerto que comenzó a arrastrarlo fuera de la batalla. Aquellos campos de Arathor se encontraban llenos de la sangre de todos aquellos que murieron en la batalla, el renegado también arrastro el cuerpo del troll que Deirons mato, dejándolo junto a él. - ¿Sabes? Eres el ganador que sobrevivió lo suficiente como para realizar mi experimento. (Dijo el Brujo) Este comenzó a extraer el alma de Deirons y a drenarla al cuerpo del troll que estaba a su lado. -Has matado a tantos, pero ahora te pondré en el lugar de ellos. En ese momento Deirons perdió la conciencia. Luego despertó con una gran confusión, Deirons se encontraba tirado en una cama, al levantarse noto que su cuerpo era distinto y hasta podía ver sus colmillos, este quedo aterrorizado al saber que ahora estaba dentro del cuerpo de un troll. En ese momento comenzó a invadirlo miles de pensamientos que aún quedaban del troll, recuerdos que no eran suyos, cada vez que se dejaba llevar por esos recuerdos podía ver a una familia, podía ver guerras, pero también veía a una esposa, hijos y amigos, en su cabeza debatían sus recuerdos y los del troll. Hasta que llego el renegado.
- ¿Que me has hecho? (Dijo Deirons)
-Te puse en la posición del troll que mataste, ¿crees que merecía la muerte? Somos como ustedes, no somos monstruos. (Dijo el Brujo)
- ¡Mejor hubiera muerto! (Dijo Deirons)
-Pero no estás muerto, ahora te toca vivir como nosotros, tu nombre ya no es el mismo, aquí te llamaras Hienaz, es el mejor nombre que pude conseguir. (Dijo el Brujo)
- ¿Que ganaras con todo esto? (Dijo Deirons) -Divertirme, además, darte una lección. (Dijo el Brujo)
- ¿Y quién eres tú? (Dijo Deirons) -Solía ser como tú, un viejo caballero llamado Urdaneta que servia a las ordenes del rey Terenas, ahora conozco este mundo desde otro punto de vista, y me gusta. (Dijo el Brujo mientras sonreía) Este estaba a punto de irse cuando se detuvo en la entrada.
-Ahora estas por tu cuenta. (Dijo Urdaneta) El Brujo se fue y Deirons salió a fuera del aposento donde se encontraba, de pronto lo invadieron recuerdos del troll donde comenzaba a ver a una bella troll en un lugar a las afueras de orgrimmar, pero en su mente sabía que esa era su esposa, pero también le llegaban los recuerdos de su hermana y de Faler, todo estaba en su cabeza, pero no organizado por lo que paso tiempo para acostumbrarse a hechos que en su vida nunca pasaron y a los que sí lo hicieron. Entonces estas palabras eran las que mayormente resonaron en su cabeza. “Volveré” Deirons siguió con su vida como parte de la nueva facción en la que se encontraba, los demás hechos se quedaron en Arathor dentro de un libro que algún día un aventurero encontrara.
Att: Tuve que hacerlo corto por falta de tiempo, espero os haiga gustado :D